El año 2020 ha quedado en el olvido. No hace falta recordar los daños económicos que causo la pandemia para el mundo y para el país, al contrario, es pertinente elaborar un ejercicio de prospectiva de las oportunidades económicas para México partiendo de los escenarios para este 2021 que ha comenzado muy agitado por los sucesos políticos del pasado día 6 de enero en la ciudad de Washington, EUA.
Si bien se trató de un acontecimiento político, este puede despejarle el camino al que será el nuevo presidente de los Estados Unidos gracias a las reacciones de los estadounidenses, más en contra que a favor, con respecto a lo sucedido ese día.
Dicho lo anterior, el primer escenario es que si partimos de una transición política ordenada para el próximo 20 de enero en los Estados Unidos, esto traerá consigo estabilidad económica y certidumbre en el mundo de los negocios no solo en el contexto de ese país , sino de los otros dos miembros del T-MEC, lo cual beneficiaria con mayor volumen de operaciones y más inversión, más aun cuando en nuestro país se ha preparado por medio de una campaña permanente de información cristalizada en seminarios, mesas redondas y boletines de información por parte de la Subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaria de Economía, donde el objetivo central ha sido comunicar a los agentes económicos involucrados en las nuevas reglas y el proceso de su implementación de dicho Tratado.